se sigue buscando

Esta mañana lady Cha y yo nos levantamos tempranito (quien dice tempranito, dice a las 12 del mediodía) y nos encaminamos a nuestra querida inmobiliaria para poner al corriente de las últimas noticias a nuestras eficientes empleadas. Cuando llegamos a la inmobiliaria, resulta que nuestras eficientes trabajadoras no estaban porque habían ido a no se donde, así que la otra empleada no instó a volver en un ratito. Como sabemos el pavo que gastan, lady Cha y yo decidimos dar un paseo turístico por la Chana: vimos un parque muy bonito (bueno bonito... vamos a dejarlo en que era un parque y punto), vimos también una iglesia muy rara y el escapare de una tienda de trajes de novia, para cuando lady Cha se case con William. Al ratito volvimos a la inmobiliaria y allí estaban esperándonos nuestras trabajadoras.

Entramos por la puerta:
(lady Cha y Mari): Hola...
(Empleada, omitiremos sus nombres XD): ¡Ya se a lo que venis y ahora voy a contestar yo!

Pero se tuvo que callar porque la llamaban por teléfono. Cuando colgó nos contó que la había llamado el administrador y que él no tenía que haber venido a molestarnos para nada, que todo eso había que solucionarlo entre él y el casero y nos instaron a denunciar si seguíamos sin agua caliente y calefacción. Total, pues que nos fuimos, ¿qué íbamos a hacer allí?
Cuando llegamos al piso, nada más entrar en el portal, nos encontramos al admi, que nos contó que al fin había conseguido hablar con el casero, que le había prometido que pagaría esta semana y que no nos preocupáramos porque ya volvía a haber agua caliente y calefacción en todo el edificio... y también nos contó que llamó a la inmobiliaria y la tipa se había puesto echa una histérica y le colgó el telefóno. No sé por qué no me extraña nada.

En fin, que cuando estábamos subiendo las escaleras, a Lady Cha la llaman las de la inmobiliaria. Conversación casi literal:

Lady Cha: acabamos de encontrarnos al administrador y ya nos ha contado que anoche habló con el casero.
Empleada: pues sí, ha dicho que pagará esta semana y que no os preocupeis. ¡Y si se os vuelve a acercar ese hombre (el admi) ni le miréis!¡No le escucheis que todo lo que dice es mentira! Si os dejan si agua y sin calefacción me llamais a mí y os doy un teléfono para que denuncieis.

Pues así están las cosas. Ya tenemos calefacción y agua caliente, ahora a ver lo que tarda el casero en volver a engrosar la deuda.